La jornada sería especial, tanto por su regreso al recinto de calle San Diego, así como por la grabación íntegra del concierto para un futuro trabajo audiovisual. El encargado de abrir la velada fue el dúo Marineros, correcta elección para encender los ánimos al ritmo de ‘Espero’, ‘Secretos’ y ‘Cae la Noche’. En solo media hora el refinado electropop de Constanza Espina y Soledad Puentes dieron atisbos de lo que llegaría minutos más tarde.
Nueve de la noche en punto y sale a escena Mena, enfundada de rojo, para interpretar ‘Cerca’ y ‘Alma’, doblete perteneciente a Espejo (2018) motor principal del show. A pesar de un pequeño desperfecto técnico en el micrófono, que fue cambiado un par de veces durante el segmento final en ‘Dentro de Ti’, la velada continuaba con fuerza en ‘Sincronía, Pegaso’ e ‘Intuición’.
‘Escalera’, uno de los puntos altos de su reciente producción, retomaba el camino en el repaso de este último. La primera sorpresa de la noche llegaría con ‘Primera Estrella’, tema que según la cantante se la piden siempre los fanáticos y que junto a ‘Cuando No La Esperas’, le quitaron el pie al acelerador. Una Javiera Mena con los lentes Skimo, creados por André Courregès, se proyectaba de fondo en la pantalla gigante que coronaba el escenario, sello inequívoco de ‘Otra Era’, canción que tuvo que sortear una pifia en la secuencia al comienzo del tema del disco homónimo.
‘Yo No Te Pido La Luna’ con una Mena que le pedía al público encender sus celulares, enmarcaba esos momentos ya clásicos en los conciertos con la lucecita prendida y el efecto que provoca. El peak de la velada se vivió con el emotivo cover de ‘Mujer Contra Mujer’, original de Mecano y con un guiño final a ‘Bohemian Rhapsody’, canción que provocó una suerte de catarsis colectiva en los asistentes y que arrancó más de una lágrima en los fanáticos.
El primer invitado de la noche fue su amigo Gepe, con quien interpretó la ya clásica ‘Sol de Invierno’, dueto que sellaron con un tierno beso entre ambos. Con ‘Al Siguiente Nivel’ se daba por finalizada la primera parte del concierto, aunque quedaba una sorpresa más para la noche.
Fue una semana bien movida para Benito Cerati en la capital, desde el homenaje a la icónica fotografía de su padre en el Metro de Santiago, el show sorpresa en la Estación Baquedano y su presentación en Bar Loreto, el hijo de Gustavo Cerati fue el invitado especial de Javiera Mena para interpretar ‘Cámara Lenta’. Acertada o no la elección, el vocalista de Zero Kill se mostró tímido en el escenario, casi rozando la abulia, sin mayor sobresalto más que unos improvisados pasos de baile con las coristas. El hype ganó en esta pasada.
La participación de los Menamorados fue clave en ciertos pasajes del concierto, desde los globos que lanzaron a la cancha, hasta la dinámica de los palitos de luz durante ‘Espada’, los fanáticos siempre marcan la diferencia en todos los shows de la cantautora. ‘Luz de Piedra de Luna’ y ‘Espejo’ le dieron el broche de oro a una velada especial, que aunque no tuvo el impacto de su primer Caupolicanazo, tanto en emotividad como en tickets vendidos (claros notorios en galería y la cancha a medio llenar), Javiera Mena se las arregló para brindar un show parejo que dejó a todos muy contentos.
*Fotos: Rodrigo Ferrari