Albert Hammond Jr.
Es curioso cómo la ansiedad y las expectativas de los medios pueden hacer que una espera se sienta mucho más larga de lo que realmente es. Y, por supuesto, esta regla aplica perfectamente a The Vaccines. La prensa hizo que su debut se sintiera como el producto de un proceso eterno (aunque realmente tardaron sólo dos años desde la fundación del grupo en publicarlo), y éste aún estaba tibio cuando fans y “expertos” por igual ya estaban preguntando por su siguiente esfuerzo. ¿Presión? No, para nada.
Ficción: The Strokes se separaron el 2006 tras la tibia recepción a su irregular placa anterior. ¿Qué habría pasado? Sin duda, los lloraríamos; seríamos viudas quejumbrosas repitiendo como una letanía a cada nueva banda hypeada: “Sí, pero no son como los Strokes. Esos sí que eran buenos”. Como sabemos, la distancia del tiempo distorsiona la realidad y tratándose de una banda con tamaño pedigree, esos cinco años habrían pasado en medio de rumores de reunión y ofertas millonarias para el festival de turno. Siempre queremos lo que no tenemos.